En algún rincón recóndito del norte del conurbano bonaerense se juntan un grupo de amigos, unidos por la misma pasión. Esa que los motivo a empezar a juntarnos, al menos una vez al mes, y ver la posibilidad de hacer quizá una filial en un futuro cercano.
Pero una filial de que ¿? Cuál es esa pasión que los une? Ni más ni menos que el Club Atlético Tigre. Ese que nos desvela, cuando las cosas no salen bien, en lo deportivo. Y que nos maravilla cuando por ejemplo nos hace jugar copas internacionales, algo impensado hace unos años atrás.
Este grupo de entusiastas hinchas, se conoció en un partido con la gente amiga de Deportivo Moron en la vieja tribuna de madera, cuando uno de los referentes de la pseudo filial no paraba de insultar a un tal Diego José; quien a los 5 minutos le tapó la boca con un golazo y nos hizo abrazar y reírnos. De ahí hasta la actualidad, coincidimos en el mimo lugar de la tribuna (sector R), cada vez se juega en el Della Giovanna.
Con esta linda excusa nació la amistad de más de 20 muchachos, de diferentes edades, de distintas generaciones. Algún día podremos decir que así nació una peña o una filial y que sus integrantes fueron: Gustavo Iglesias, Oscar Iglesias(petiso), Luca Iglesias, Nacho Cicocioppo, Gonzalo Raggi, Alejandro Solis (polaco), José Luis Feria, Carlos Gil, Cristián gil, Bruno Pereyra, Lucio Pereyra, Juan Carlos Pereyra, Gabriel Pereyra(pela), Humberto Sandoval(nunca viene) y Alan Sandoval. Invitado especial, aquel formidable delantero "pájaro" Figun. Hagamos que la zona norte sea una familia, como dice la canción de cancha. Pero no cada vez que juegue Tigre, sino cada vez que la excusa sea el matador de Victoria.
